SANTIAGO.- La empresa Volkswagen decidió dar luz verde al desarrollo de una versión convertible de su recién estrenado T-Roc, un crossover compacto que no esconde su espíritu deportivo, toda vez que comparte plataforma con el Golf, aún cuando se acerca más al Polo por la calidad de sus materiales, refinamiento de marcha y otros detalles.
Para llevar adelante el proyecto se ha destinado un inversión de 80 millones de euros que permitirá comenzar la producción del nuevo SUV cabrio gracias a una “amplia modernización de la tecnología de producción, el ensamblaje y la logística de la planta de Osnabrück”, la que debería quedar habilitada para producir, una vez finalizada la primera etapa, unas 20 mil unidades al año.
El presidente de Volkswagen, Herbert Diess, declaró al respecto que “con el descapotable basado en el T-Roc, añadiremos un modelo altamente emocional a la gama”, al tiempo que resaltó que “la planta de Osnabrück tiene un futuro brillante por delante“.
Con el nuevo cabrio basado en el T-Roc, Volkswagen reforzará “aún más” su presencia en el segmento de los SUV compactos, uno de los que más crece en los mercados automovilísticos mundiales. Sin ir más lejos durante 2017 fue el segmento que arrastró a números azules a la industria automovilística.
El T-Roc se lanzó en los mercados europeos a fines del año pasado y a la fecha ya se han registrado más de 40.000 pedidos de este modelo.
20 modelos SUV a 2020
Actualmente, los SUV contribuyen de forma “esencial” al crecimiento de la principal marca del grupo, ha apuntado Volkswagen.
Además, para 2020, Volkswagen tiene previsto ampliar su gama SUV en todo el mundo a 20 modelos y prevé que cerca del 40% de los vehículos vendidos sean de esa línea.
Con 720.000 Tiguan entregados, el SUV compacto figura entre los 10 modelos más vendidos del mundo y entre los tres primeros SUV.
La factoría de Volkswagen en Osnabrück cuenta con cerca de 2.300 empleados y en 2017, la planta produjo más de 76.000 unidades en tres cadenas de montaje.
Esta planta, que fabrica el Volkswagen Tiguan, el Porsche Cayman y es responsable de una parte del trabajo de pintura del Skoda Fabia, ha producido más de 280.000 vehículos desde el comienzo de su actividad en 2011.