SANTIAGO.- En febrero, el motor diésel cumplió 125 años de vida y recibió el nuevo aniversario en medio de escándalos que lo mantienen alejado de su época dorada cuando era el propulsor preferido por los fabricantes de vehículos y conductores. Hoy, el diésel va en retirada en distintos países del mundo por sus efectos contaminantes y son varias las empresas que ya han anunciado el fin de su producción dando paso a nuevas formas de movilizarse como la electricidad.
El diésel cada vez menos popular
Los altos niveles de contaminación en varias urbes del planeta, sumado al estallido del denominado “diéselgate” en 2015, caso en el que Volkswagen fue acusado de haber instalado un software para cambiar los resultados de los controles técnicos de emisiones de contaminantes en millones de sus vehículos, se convirtieron en los factores determinantes para explicar la caída del crudo.
Además, el acelerado avance tecnológico ha permitido desarrollar nuevas formas de propulsión como la eléctrica, híbrida o incluso de hidrógeno, métodos amigables con el medioambiente y que buscan ser el futuro del sector automotriz.
De ahí que no sea extraño que las ciudades con mayor número de vehículos en el mundo tomaran la decisión de prohibir gradualmente los motores diésel en sus calles. Por ejemplo, Francia anunció el año pasado su decisión de poner fin a la comercialización de los autos diésel y a gasolina en 2040.
El Reino Unido hará lo propio para esa misma fecha (2040), año en el que todos los vehículos que funcionen con diésel o gasolina estarán prohibidos. Ambos países buscan disminuir los peligrosos índices de contaminación en las calles y favorecer la salud de los habitantes.
India y Noruega también exigieron a los fabricantes de vehículos que adapten sus estrategias porque en el futuro no podrán circular los autos movidos por el crudo, mientras ciudades como Roma buscan adelantar el fin del crudo informó que a partir del 2024 no podrán transitar por las calles céntricas de la urbe italiana los autos diésel.
Sin embargo, el reciente caso de Alemania es uno de los que más repercusión ha tenido estas semanas porque justamente las empresas acusadas de manipular los vehículos diésel provienen de ese país europeo. Al igual que en varios sectores del mundo, el aire en muchas ciudades alemanas marca registros peores de lo que permite la ley, lo que contribuye a enfermedades respiratorias y miles de muertes al año.
Según las cifras del gobierno germano, unas 6.000 personas mueren prematuramente cada año en el país debido a los niveles excesivos de óxidos de nitrógeno nocivos o NOx. El NOx son gases tóxicos que pueden dañar las vías respiratorias y los ojos si su concentración es muy alta. También pueden causar problemas cardiovasculares y pulmonares.
Por eso es que el Tribunal Administrativo Federal de Alemania dio luz verde para que las ciudades puedan prohibir la circulación de automóviles diésel con el objetivo de reducir la contaminación del aire en un veredicto que afecta a millones de conductores en el país europeo y que se estima que tendrá repercusiones significativas para la industria automotriz de ese país.
Empresas se desmarcan del motor diésel
A raíz de los distintos anuncios de prohibición, los principales fabricantes de vehículos han debido adaptarse a las nuevas exigencias y ya son varios los que también informaron el fin de la era de los diésel en el corto plazo.
Uno de ellos es Toyota, quien comunicó que a fines de este año dejará de vender en Europa autos diésel. El anuncio de la marca nipona se dio a conocer en Suiza en el marco de una nueva versión del Salón del Automóvil de Ginebra.
El 2017 Volvo también dio un golpe al diésel y descartó realizar inversiones para el desarrollo de nuevos motores que se muevan con este tipo de combustible. Su objetivo es trabajar sobre la base de los motores que ya creó en el pasado y aspirar a disminuir en la mayor cantidad posible la emisión de los gases contaminantes.
Asimismo, y después de todo el escándalo del diéselgate, Volkswagen dio a conocer su deseo de dejar de subvencionar este tipo de tecnologías. Tras las acusaciones de manipular los niveles de contaminantes, el presidente de la firma, Matthias Muller, afirmó que “tenemos que cuestionar la lógica y los objetivos de estas subvenciones al diésel”.
A principios de este año, Financial Times aseguró que el Grupo Fiat se sumó a las marcas que le dicen no al diésel y lo eliminará de sus autos en el año 2022.
La tendencia eléctrica en su apogeo
De la mano de los anuncios por parte de las grandes marcas de dejar el diésel, llegó con fuerza la tendencia eléctrica. En la actualidad son varios los modelos, incluso deportivos y SUV, los que se inclinan por este tipo de energía para cuidar el medioambiente. No por nada la empresa Tesla, de Elon Musk, logró tanta popularidad a nivel mundial gracias a sus vehículos cero emisión.
Los pendientes en esta materia, eso sí, está en la autonomía que pueden ofrecer los vehículos, el precio de los mismos y la infraestructura para cargar los autos.
Sin embargo los expertos aseguran que todo eso se subsanará en el corto plazo y los vehículos eléctricos serán los próximos protagonistas en el futuro de la industria automotriz.