SANTIAGO.- Los vehículos Volkswagen siguen sin cumplir con la normativa anticontaminación a pesar de haber sido llamados a revisión para modificar sus motores luego del escándalo del “Diéselgate”, reveló un estudio publicado este lunes por la Asociación Australiana del Automóvil (AAA).
A finales de 2015, el líder mundial del mercado automotriz reconoció que 11 millones de sus autos diésel tenían un programa para manipular los resultados de los tests de contaminación y que sus emisiones superaban en realidad 40 veces la norma.
Pero aunque esos vehículos fueron llamados a revisión, según la AAA siguen sin respetar la normativa.
"El análisis de las emisiones (...) demuestra que los vehículos Volkswagen afectados utilizan un 14% más de diésel tras la revisión y que tienen niveles de emisiones nocivas superiores en un 400% a los que se habían observado en los tests de laboratorio", indicó la AAA en un comunicado.
Aunque las emisiones son inferiores a las de antes de la llamada a revisión, siguen siendo superiores a los límites autorizados en Australia, según la asociación, que lleva a cabo los test en colaboración con la Federación Internacional del Automóvil (FIA).
Sin embargo Volkswagen aseguró este lunes que la agencia federal alemana del automóvil (KBA) aprobó la revisión de su programa informático y que los vehículos revisados "continúan cumpliendo las normas europeas y australianas de emisiones".
Cerca de seis millones de vehículos, 42.000 de ellos en Australia, fueron llamados a revisión, según cifras de Volkswagen.