SANTIAGO.- Los cargos penales presentados por el Departamento de Justicia de Estados Unidos en contra de Martin Winterkorn, ex presidente ejecutivo de Volkswagen, en el caso en el que millones de vehículos de la marca alemana fueron alterados para burlar los controles de emisión marcó el último episodio de la crisis judicial que enfrenta la empresa.
Desde que explotó el denominado “dieselgate”, Volkswagen se ha visto sacudido por cambios en la plana mayor, demandas y fuertes críticas de sectores ambientalistas. Sin embargo, y pese a todos los problemas, la marca sigue como una de las más vendidas a nivel mundial.
Estas son las principales acusaciones en curso contra Volkswagen.
En Estados Unidos
El caso estalló en septiembre de 2015, cuando la Agencia para la Protección del Medio Ambiente (EPA) denunció a Volkswagen por haber instalado en 11 millones de sus vehículos diésel -600.000 de ellos vendidos en Estados Unidos- un programa informático capaz de manipular los resultados de las pruebas de contaminación y esconder las emisiones reales, hasta 40 veces superiores a las permitidas.
Volkswagen se declaró culpable ante las autoridades estadounidenses por fraude y obstrucción de la justicia.
En mayo de 2017, la justicia estadounidense aprobó un plan de indemnización para unos 600.000 clientes, lo que lleva a más de 22.000 millones de dólares lo que la marca ha tenido que desembolsar para indemnizar a autoridades, clientes y concesionarios.
Aunque Volkswagen no está imputado judicialmente como empresa, sus empleados sí lo están y hasta ahora ocho dirigentes y exdirigentes fueron inculpados en Estados Unidos.
Entre ellos Martin Winterkorn, acusado de "fraude" y "conspiración", y un dirigente de Audi, una filial de Volkswagen.
De esas nueve personas, dos ingenieros fueron condenados. En agosto de 2017 un ex dirigente de Volkswagen James Liang, también fue condenado a 40 meses de prisión.
Su colaboración permitió inculpar a otros responsables del grupo, entre ellos Oliver Schmidt, responsable del servicio de conformidad de la reglamentación en Estados Unidos entre 2014 y marzo de 2015, que se declaró culpable y fue condenado a siete años de prisión.
En Alemania
Varias fiscalías están investigando por fraude, manipulación en bolsa y publicidad engañosa a Volkswagen y algunas de sus marcas, como Audi o Porsche, pero también a Daimler o a la compañía de equipamiento Bosch.
Winterkorn y su sucesor Martin Müller, igual que el actual presidente del consejo de vigilancia del Volkswagen, Herbert Diess, están siendo investigados.
Las autoridades registraron además los locales de Volkswagen, Audi y Porsche, igual que los apartamentos privados de empleados o ex empleados.
La investigación de la fiscalía de Brunswick, competente en la región donde Volkswagen tiene su sede, en Wolfsburgo, implica a 49 personas.
A nivel privado, la denuncia más importante es la de un grupo de miles de inversores ante el tribunal de Brunswick que reclaman unos 9.000 millones de euros en indemnizaciones.
Los inversores, que perdieron miles de millones de euros cuando las acciones cayeron un 40% en dos días, acusan a la dirección de Volkswagen de no haber informado a los mercados financieros a tiempo de la crisis.
Por su parte existe una denuncia agrupada de los consumidores y hay otra en preparación para pedir el reembolso de los coches diésel.
Los propietarios alemanes tienen hasta finales de 2018 para presentar denuncias antes de que prescriba el caso.
En Europa
La fiscalía de París abrió en febrero de 2016 una investigación contra Volkswagen por "engaño agravado".
En Italia las autoridades de la competencia condenó a Volkswagen en agosto de 2016 a una multa de cinco millones de euros por "prácticas comerciales incorrectas".
A principios de 2017, hubo una denuncia colectiva contra la campaña en Reino Unido y también hay casos ante los tribunales de Polonia.