SANTIAGO.- El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) emitió una alerta de seguridad que afecta a 19 unidades de los modelos Dodge Caravan y Jeep Wrangler vendidos en el país entre diciembre de 2017 y marzo de 2018.
El anunció se realizó luego que Comercial Chrysler informara al organismo público que se detectó un desperfecto en el interruptor de la luz de freno que implica “un riesgo para la seguridad de los consumidores”.
Según indica el comunicado del Sernac, se determinó que “el interruptor de la luz de freno del vehículo puede estar funcionando incorrectamente, lo que se identifica con la iluminación del testigo de mal funcionamiento (MIL), un tono audible y el encendido permanente de las luces de freno”.
El texto añade que el incorrecto funcionamiento de este interruptor “podría permitir que se cambiara de la marcha PARK a otra marcha sin pisar el pedal del freno, además que las luces de freno traseras permanecieran encendidas continuamente”.
Advierten además que “poder sacar el vehículo de la posición PARK sin estar pisando el pedal del freno (y con el encendido en modo RUN) y/o tener las luces de freno traseras permanentemente encendidas, puede causar que el vehículo sufra una colisión sin previo aviso”.
Pese a ello, aseguraron que hasta el momento no se han reportados incidentes derivados del mal funcionamiento ya descrito en los vehículos Dodge Caravan y Jeep Wrangler vendidos entre diciembre de 2017 y marzo de 2018.
El Servicio Nacional de Consumidor aclaró que la empresa invita a los clientes que posean estas unidades a contactar al servicio técnico autorizado de su preferencia, para agendar cita y sustituir el interruptor de la luz de freno, procedimiento que tiene una duración de aproximadamente una hora y será sin costo para el cliente.