SANTIAGO.- Hace dos años un hombre de la pequeña localidad británica de Chipping Norton saltó a la fama por construir el “auto-cobertizo” más rápido del mundo que, en ese entonces, alcanzó una increíble velocidad de 141 kilómetros por hora. Ahora ese mismo vehículo rompió su propio récord llegando a los 163 km/h en una de las pruebas más curiosas del sector automotriz.
El llamativo vehículo fue construido por Kevin Nicks de 54 años que en el 2016 decidió modificar completamente su Volkswagen Passat para transformarlo en un cobertizo rodante, según publicó Jalopnik.
En ese entonces invirtió la suma de 6.500 euros, alrededor de 5 millones de pesos, y siete meses de trabajo para dejar al auto como un cobertizo completamente equipado con aire acondicionado, equipos de música y asientos de cuero, entre otras comodidades.
Un cambio de motor para lograr el récord
En un principio el vehículo de Nicks tenía un motor V6 de la marca Volkswagen. Sin embargo para romper el récord decidió cambiarlo por un bloque de Audi que puede erogar nada menos que 450 caballos de potencia.
Ese fue el impulso necesario para que el cobertizo lograra una mayor aceleración y velocidad final permitiendo además mover una pesada estructura de más de dos toneladas.
En la actualidad se estima que el cobertizo del hombre de 54 años es el único con permiso legal para ser conducido como un vehículo luego que Nicks hiciera todas las gestiones correspondientes para lograr dicho cometido.