HEMER.- Poco le duró la felicidad a un joven alemán de 18 años de edad que hace unos días cumplió con todos los requisitos que establece la ley para obtener su licencia de conducir, ya que 49 minutos después de tener el permiso fue detenido por la policía, junto a otros cuatro amigos, conduciendo a exceso de velocidad en una zona urbana.
Lo que para muchos es solo un récord de irresponsabilidad y una mala anécdota juvenil, es más bien el inicio de un largo y engorroso proceso para que el infractor recupere sus documentos y pueda volver a ponerse tras el volante con sus antecedentes en orden.
Si bien el nombre del joven no fue revelado por la policía de la ciudad alemana de Hemer, se indicó que este fue detenido conduciendo a 95 km/h en una zona urbana donde el límite máximo era de tan solo 50 km/h.
El informe de la autoridad indica que el infractor fue controlado con una pistola láser muy cerca de su domicilio y que junto a él viajaban cuatro amigos a quienes, supuestamente, intentaba impresionar “con su nueva libertad” que tan solo duró 49 minutos.
"Algunas cosas duran para siempre, otras no duran más de una hora", dijo la policía local en su declaración sobre el incidente.
Ahora el joven conductor está con prohibición de manejar por un periodo de cuatro meses y, a juicio de las autoridades, deberá someterse a un "entrenamiento costoso" antes de que tenga la oportunidad de recuperar sus documentos.
Como si eso fuese poco debe pagar una multa de 200 euros (153 mil pesos aprox.) por la infracción cometida y su periodo de prueba como nuevo conductor se extenderá automáticamente de dos (periodo normal establecido por la ley) a cuatro años.
En Alemania las multas por exceso de velocidad en zonas urbanas van desde los 10 euros (alrededor de los 7.600 pesos chilenos) hasta los 680 euros (518.000 pesos chilenos aprox.), dependiendo de la gravedad de la infracción. Además también se pueden imponer prohibiciones de conducción de hasta tres meses.