DETROIT.- Volkswagen AG y Ford Motor Co anunciaron este martes que unirán fuerzas para el desarrollo de pick-ups y camionetas comerciales en el marco de una potente alianza que además explora la posibilidad de expandir la colaboración en tecnología eléctrica y de autoconducción.
El objetivo es conseguir que ambos gigantes de la industria automotriz reduzcan sus gastos de producción y ahorren miles de millones de dólares.
Ford y VW anunciaron su asociación en el marco del Salón del Automóvil de Detroit. La sociedad, que se iniciará con las ventas de las camionetas medianas en 2022, no implicará una fusión o participaciones de capital, dijeron las compañías.
La alianza, que estará gobernada por un comité conjunto que incluye a los presidentes ejecutivos de ambas compañías, destaca la creciente presión para que las automotrices administren los costos de desarrollo de vehículos eléctricos y de conducción autónoma, así como la tecnología para cumplir con los estándares de emisiones más estrictos en millones de vehículos de combustión interna que venderán en los próximos años.
"Las medidas que tomemos ligadas a nuestros acuerdos de alianza pueden influir en varios de nuestros planes de negocios para regiones clave, y esperamos comenzar a compartir una cantidad de esos detalles con ustedes a partir de las próximas semanas", dijo el presidente ejecutivo de Ford, Jim Hackett, en un correo a los empleados de la firma.
Ford diseñará y construirá camionetas de tamaño mediano para ambas compañías, dijo Volkswagen. La firma estadounidense también diseñará y construirá camionetas comerciales más grandes para clientes europeos, mientras que la automotriz alemana desarrollará y construirá una camioneta urbana.
Las compañías estiman que la cooperación generará mejores resultados operativos anuales a partir de 2023.
Ford y Volkswagen firmaron un memorando de entendimiento para desarrollar conjuntamente vehículos eléctricos y autosuficientes, dijo el presidente ejecutivo de la firma alemana, Herbert Diess, en una copia de un discurso entregada a Reuters.
El mayor fabricante de automóviles de Europa y el número dos de Estados Unidos han estado explorando una cooperación más estrecha, en un contexto en que las fricciones comerciales obligan a las automotrices a repensar dónde construyen vehículos para Europa, Estados Unidos y China.