Dos tercios de los alemanes viven en viviendas multifamiliares y difícilmente tienen la posibilidad de cargar un coche eléctrico, según un estudio difundido por el Automóvil Club Alemán (ADAC).
Además, en el 96 por ciento de los aparcamientos subterráneos no hay siquiera enchufes ordinarios, señaló ADAC. La entidad informó que sólo un 2% de los garajes subterráneos y aparcamientos con más de diez espacios para coches cuentan con al menos una columna o estación de carga eléctrica.
ADAC consultó a 310 empresas de bienes raíces en once grandes ciudades alemanas que administran en total unos 4.815 aparcamientos subterráneos y playas de estacionamiento.
"Cuatro de cada cinco de estas empresas no cuentan con estaciones de carga para coches eléctricos. En las pocas firmas que cuentan con cargadores de pared del tipo 'Wallbox', estos suelen instalarse en objetos aislados", sostiene el estudio.
Sólo un cuarto de las compañías consultadas analiza instalar sistemas de carga para coches eléctricos en los próximos tres años.
Los administradores de los aparcamientos argumentaron que "no hubo expresiones de interés de parte de propietarios e inquilinos", según ADAC.
De los 47,1 millones de coches que integran el parque automotor alemán, según cifras oficiales sólo el 0,2 por ciento son vehículos eléctricos o híbridos que necesitan carga eléctrica. Las firmas de bienes raíces alegaron en tanto que los altos costos, los problemas técnicos y la inseguridad jurídica demoran la instalación de estaciones de carga eléctrica en sus aparcamientos.
Una toma de corriente doméstica no es suficiente para cargar automóviles eléctricos a largo plazo. La carga prolongada bajo alta carga puede provocar un incendio en el cable. Las cajas de pared pueden cargar cinco o diez veces más rápido sin riesgo.
Según la ley alemana sobre la propiedad de viviendas, las transformaciones sólo pueden llevarse a cabo con el consentimiento de todos los copropietarios. Los inquilinos no tienen derecho a reclamar.