El Salón del Automóvil de Frankfurt sigue entregando sorpresas a los fanáticos de las tuercas y esta vez fue el turno de Land Rover que presentó de manera oficial su nuevo Defender 2020, modelo que no tenía actualizaciones desde el 2016.
El vehículo volvió en gloria y majestad con una dramática puesta en escena en Alemania, descendiendo de una inclinación de 42 grados para demostrar todo su poder en terrenos complicados.
Con una configuración de tres y cinco puertas, el robusto coche llegará a los mercados internacionales con motorizaciones bencineras y diésel, para luego sumar una versión híbrida enchufable.
En ese sentido el todoterreno tendrá en primera instancia cuatro opciones de motorización, todas con una caja automática de ocho velocidades. La versión de tope de gasolina podrá erogar nada menos que 400 caballos de potencia y 550 Nm de par, mientras que el diésel logra 240 caballos de potencia. Todas las opciones vienen con tracción integral.
El diseño sigue siendo igual de robusto que las generaciones anteriores aunque esta vez exhibe líneas más marcadas que le entregan una apariencia juvenil y moderna, según destacó el fabricante.
En ese mismo punto también resalta el hecho que el modelo tendrá hasta 170 accesorios disponibles para personalizar el vehículo todoterreno.
Finalmente la marca destacó que el coche tiene “una carga útil máxima de hasta 900 kg, una carga estática en el techo de hasta 300 kg, una capacidad de remolque de 3.720 kg y una profundidad de vadeo de hasta 900 mm”.