Patti Baumgartner es una abuela que vive en un tranquilo pueblo del estado de Montana (EE.UU.) y que hizo noticia al recurrir a un ingenioso y poco ortodoxo método para que los vehículos reduzcan la velocidad en la carretera local, por donde, según dijo, circulan habitualmente sus nietos.
La mujer, cansada que la autoridad no hiciera nada, decidió sentarse junto a la ruta y apuntar con su secador de pelo a los autos que en un principio pasaban a toda velocidad poniendo en riesgo la vida de los peatones y quienes se desplazan en bicicleta.
El resultado, los conductores la confundían con un oficial de la ley y a su secador de pelo con una pistola que mide la velocidad, por lo que inmediatamente reducían su marcha.
"Se olvidan de reducir la velocidad y hay muchas personas que se quejan de que no pueden caminar o andar en bicicleta allí”, dijo la abuela, quien al hablar del asunto con sus familiares y amigos tomó la decisión de hacer algo.
“Estábamos hablando de que tal vez algo retrasaría la marcha de los autos. Por lo tanto, decidimos ponerme en una silla y creo que usar el secador de cabello fue lo primero que se me ocurrió", relató la mujer a medios locales.
Si bien no existe estadística que avale un descenso en la velocidad de los vehículos que por ahí circulan, la abuela aseguró que seguirá usando su táctica hasta que los conductores locales tomen conciencia del peligro que significa no respetar los límites de velocidad.
Una foto de la mujer se hizo rápidamente viral en el país del norte y la abuela recibió decena de saludos y comentarios a favor.
Un usuario comentó: "¡Amo a las personas que realmente se hacen cargo y dejan de quejarse! ¡Así se hace, señora!"
Incluso la policía local aplaudió y valoró la acción de la abuela, nombrándola miembro honoraria de la patrulla de carretera de Montana.