Con la popularidad de los vehículos eléctricos cada vez más en alza, las empresas también deben enfocar su atención en la seguridad de estos coches y fue así como Bosch presentó un innovador sistema que se basa en pequeñas explosiones intencionales para evitar las descargas al momento que un automóvil protagonice un accidente.
Esto porque uno de los principales problemas de los vehículos cero emisiones al momento de un choque son las potentes descargas eléctricas que puede generar la batería, dificultando el trabajo de los rescatistas y de los afectados que intentan salir del auto siniestrado quienes podrían sufrir graves lesiones al momento de tocar el coche.
Es así que la compañía alemana ideó un sistema de microchips que genera pequeñas cargas explosivas con el objetivo de aislar las fuentes de alimentación en caso de una colisión y así evitar descargas.
“Los chips de semiconductores de Bosch aseguran que la batería de alto voltaje se desconecte automáticamente, de modo que nadie en la escena del accidente (ocupantes de vehículos, equipos de rescate, socorristas) entre en contacto con los componentes que transportan corriente”, explicó la empresa.
De esta forma, “los dispositivos semiconductores son parte de un sistema de interruptor de seguridad pirotécnico, o pirofusible. Estos sistemas apagan secciones enteras de la conexión del cable a la batería de alto voltaje por medio de cargas explosivas en miniatura, cortando así de manera rápida y efectiva la circulación de energía”.
Así las cosas, “al cortar el flujo de corriente de esta manera, se elimina el riesgo de descarga eléctrica o incendio”, subrayó Bosch.