General Motors Co recortó este martes su previsión de ganancias para 2019, indicando que la huelga de 40 días que paralizó virtualmente todas sus operaciones en Norteamérica le costará unos 3.000 millones de dólares en utilidades este año.
Pese a todo, las acciones de GM ganaban cerca de un 5% antes del cierre de operaciones de esta jornada, gracias a ganancias netas trimestrales mejores de lo esperado por ventas robustas en Estados Unidos de camionetas pickup y SUVs de alto margen.
Analistas de Wall Street consideran que los costos de la huelga están compensados por tres cierres de plantas en Estados Unidos acordadas con el sindicato United Auto Workers (UAW) y que impulsarán la rentabilidad de GM.
"El negocio principal fue sólido este trimestre", dijo a periodistas en la sede de GM el presidente financiero, Dhivya Suryadevara, describiendo la huelga como "un impacto único".
El pasado viernes, los 48.000 miembros de UAW en GM ratificaron un nuevo acuerdo laboral de cuatro años con la compañía de Detroit. Analistas dijeron que la huelga de 40 días costó a GM más de 2.000 millones de dólares.
La automotriz reportó un incremento del 6% en las ventas en Estados Unidos en el tercer trimestre, lideradas por sus altamente rentables camionetas pickup, SUVs y crossovers, que le ayudaron a lograr un sólido margen de ganancias de casi un 11% en Norteamérica. Los inversores se mostraron especialmente animados por el negocio principal.
"Francamente, estoy más animado que nunca", dijo Chris Susanin, cogerente de cartera en Levin Easterly Partners, propietario de más de 4 millones de acciones de GM a fines de junio. "No veo por qué esta acción no debería superar los 100 dólares (por título) en un par de años".