El popular modelo Trabant se hizo conocido en la República Democrática Alemana y se convirtió en un verdadero símbolo germano que hasta hoy se hace presente especialmente en el sector turístico de Berlín.
El vehículo, que ganó popularidad especialmente en los años de la Alemania dividida, volvió a salir a las calles para celebrar un nuevo aniversario de la caída del Muro de Berlín el fin de semana recién pasado.
El desfile se realizó entre Turingia y Baviera, abriendo de manera simbólica una puerta que en el pasado fuera un paso fronterizo que dividía a la Alemania Oriental y Occidental.
Hasta ese lugar llegaron alrededor de 65 de los populares “Trabis” para dar vida a una extensa fila de vehículos que además estuvieron acompañados de otros nombres ligados a la industria automotriz como Moskvitch, Zastaba, Wartburg.