Recorrer Estados Unidos de costa a costa en el menor tiempo posible es uno de los desafíos más llamativos en materia automotriz en el país del norte y cada cierto tiempo un grupo de aficionados se lanza al reto emulando la clásica película “The Cannonball Run” de 1981. Ahora, tres jóvenes aseguran que lograron romper el récord en un viaje a campo traviesa desde Nueva York a Los Ángeles.
Se trata de Arne Toman, Douglas Tabbutt y Berkeley Chadwick quienes comenzaron el intrépido viaje el 11 de noviembre a las 12:57 en el Red Ball Garage en Manhattan y terminaron en el hotel Portofino en Redondo Beach en 27 horas y 25 minutos.
Esta marca logró batir el récord anterior de 28 horas y 50 minutos. “Esto es un sueño de toda mi vida. No tengo intenciones de intentarlo de nuevo. Tuvimos un clima y tráfico perfecto, sin construcciones, etc., así que no creo que pueda recrearlo nuevamente o tener la misma buena suerte”, dijo Toman a CNN.
Rompen el récord, pero también las reglas de velocidad
Para lograr tal hazaña, los jóvenes tuvieron que romper varias veces los límites de velocidad de Estados Unidos, llegando incluso a los 300 kilómetros por hora.
De ahí que durante el trayecto el equipo necesitó de “todas las medidas de ayuda de navegación” para detectar a los policías y se apoyaron de casi 20 aplicaciones diferentes para evitar ser sorprendidos superando los límites de velocidad.
De esta forma, publicó CNN, utilizaron Waze, radares, binoculares e incluso una radio de “banda ciudadana”. Todo eso les permitió no ser cazados por la policía en medio de la carrera.
Con un auto modificado
Además de todos los sistemas de detección policial, el grupo también aseguró que tuvo que modificar el vehículo para lograr el menor tiempo conocido hasta ahora.
Así las cosas, el coche escogido fue un Mercedes-Benz E63 AMG al que se equipó con interruptores de freno, mayor cantidad de luces traseras, unidades de GPS y un completo paquete mecánico que le permitió superar los 700 caballos de potencia, explicó el medio Autoweek.
A raíz de esas modificaciones que le entregaron mayor potencia, el Mercedes también incluyó enfriadores intermedios y mejoras en la suspensión.
Como si fuera poco, el auto también contó con una celda de combustible extra para evitar queda varado en medio de la carrera y cumplir así su objetivo.
