Desde el año pasado la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC por sus siglas en inglés) viene trabajando en la implementación formal de la nueva era de los hiperautos que llegarían a reemplazar a los conocidos LMP1 (Le Mans Prototype).
Ahora, después de meses de deliberaciones, el Consejo Mundial de Deportes Motor de la FIA anunció novedades con respecto a la próxima categoría. Formalmente se llamará “Le Mans Hypercar” y tendrá una serie de reglas para los competidores.
Así, por ejemplo, según informó el medio Carscoops las marcas que entren a la carrera con un hiperauto tendrán que fabricar al menos 20 unidades más de ese modelo pero homologado para calle.
La idea del nuevo cuerpo regulatorio, que entrará en vigencia durante la temporada 2020-2021, es atraer a la competencia vehículos que estén más cerca de los hiperdeportivos de producción y cuyo costo operacional será mucho más bajo que los actuales autos de carrera.
Por otro lado a los equipos que compitan también se les otorgará cierto kilometraje de prueba sin restricciones durante el primer año de homologación para cada automóvil.
Otro de los anuncios que realizó la FIA fue que “los hiperautos de construcción privada que no estén unidos a una marca automotriz no podrán competir”, publicó el mencionado medio.
Los competidores “deben ingresar a un automóvil homologado con el nombre de una marca automotriz", especificó la FIA.
Entre otras de las disposiciones aprobadas por la FIA resalta la norma que establece nuevos límites en el peso y potencia de los “hiperautos”. En el primero de los casos se aumenta de 875 kilogramos como mínimo que debían pesar los LMP1 a 1.040 kilogramos para los hiperautos.
Con respecto a su tamaño se indicó que estos tendrán 35 centímetros más de longitud que los actuales LMP1, alcanzando los 5 metros de extensión. En cuanto a su ancho se indicó que este crece en 10 centímetros para rozar los dos metros.