Dos fallas diferentes en las bolsas de aire obligaron a Toyota y a Honda a concretar un llamado a reparación de 6 millones de vehículos a nivel internacional. Ambos problemas representan peligros para los automovilistas, dijeron los responsables.
La revisión por parte de Toyota afecta a unos 3.4 millones de automóviles y se debe a que las bolsas de aire podrían no inflarse al momento de un accidente.
Los vehículos tienen computadoras de control de bolsa de aire fabricadas por ZF-TRW que son vulnerables a la interferencia eléctrica y podrían no enviar la señal para que las bolsas se inflen.
Según dijeron, el problema podría afectar hasta a 12.3 millones de autos en Estados Unidos fabricados por seis compañías y se especula que hasta ocho personas podrían haber fallecido cuando las bolsas de aire no se inflaron.
Al respecto se indicó que los reguladores de seguridad estadounidenses ya iniciaron sendas investigaciones para aclarar este asunto y establecer si existió alguna responsabilidad de la maquinaria en los decesos.
En tanto, el llamado a revisión de Honda cubre unos 2.7 millones de vehículos en Estados Unidos y Canadá con infladores de bolsas de aire Takata, empresa que en 2017 se declaró en quiebra tras la crisis provocada por sus airbag defectuosos.
No obstante, en este caso se trata de una versión distinta a las bolsas de aire acusadas de ser responsables de 25 decesos a nivel internacional.
Sin embargo, se dijo que cabe la posibilidad que estas nuevas bolsas de aire puedan hacer explotar un bote de metal y arrojar metralla a conductores y pasajeros.
Por el momento, el llamado a revisión no afectaría a vehículos del mercado chileno y prueba de ello es que el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) no ha publicado hasta ahora ningún llamado a revisión para esas marcas en lo que va del año. El organismo contralor es quien emite las advertencias previa comunicación con la marca afectada.
Desperfectos detectados
En un comunicado público Toyota dijo que la computadora de algunos de sus modelos podría no tener la protección adecuada contra el ruido eléctrico que puede ocurrir en los accidentes, como cuando el vehículo termina debajo de otro.
El problema, añadieron, puede causar una apertura incompleta de las bolsas de aire, o simplemente que estas no se abran y de ahí la urgencia de llevar los vehículos afectados hasta un concesionario.
El fabricante japonés informó además que este desperfecto también podría hacer fallar los dispositivos que preparan los cinturones para una colisión.
En la mayoría de los casos, las concesionarias de Toyota instalarán un filtro de ruido entre la computadora de control de la bolsa de aire y un arnés de cableado.
Añadieron que los propietarios de los vehículos que son objeto de la revisión serán notificados a mediados de marzo próximo.
Modelos involucrados
La revisión cubre algunos autos Corolla de 2011 a 2019, otros Matrix de 2011 a 2013, el Avalon de 2012 a 2018, y el modelo Avalon Híbrido de 2013 a 2018 en Estados Unidos.
En marzo de 2017, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de Estados Unidos comenzó a investigar los problemas con las computadoras de bolsas de aire ZF-TRW.
La pesquisa se expandió en abril del año pasado a 12.3 millones de vehículos fabricados por Toyota, Honda, Kia, Hyundai, Mitsubishi y Fiat Chrysler, que incluye modelos de 2010 a 2019.
La revisión de Honda cubre algunos de sus vehículos, así como otros de Acura, de los modelos de 1996 a 2003.
Los autos Honda que fueron incluidos en este llamado son: el Accord coupé y el sedán de 1998 al 2000, el Civic coupé y sedán de 1996 al 2000, la CR-V de 1997 a 2001, la Odyssey de 1998 a 2001, y la EV Plus de 1998.
Los infladores del conductor que serán revisados forman parte de un llamado anunciado por Takata en noviembre pasado y que cubre por lo menos 1.4 millones de vehículos de cinco automotrices.
Honda dijo que revisará una cantidad mayor para asegurarse de recolectar todos los infladores defectuosos.
