Lordstown
A medida que el segmento eléctrico sigue ganando fuerza en la industria automotriz, son cada vez más las empresas y startups que se embarcan en la estrategia de fabricar este tipo de vehículos para cubrir las necesidades de los conductores que año a año apuestan por la tecnología cero emisiones.
En ese escenario la startup Lordstown, que nació hace alrededor de tres años y que es respaldada por el gigante General Motors, ha sido considerada una de las más prometedoras en el segmento luego de la presentación de su camioneta Endurance.
Sin embargo, durante los últimos días la compañía se vio envuelta en una fuerte polémica luego de ser acusada de falsificar pedidos anticipados de la pick-up.
Según un informe publicado por la empresa de investigación de inversiones, Hindenburg Research, misma firma que acusó de fraude a Nikola por su camión supuestamente autónomo, indicó que Lordstown le pagó a consultores para reservar alrededor de 100 mil camionetas eléctricas hasta la fecha.
El objetivo de la start-up, según indica la prensa internacional, era crear altas expectativas con respecto a su nuevo vehículo para atraer a nuevos inversionistas durante los próximos años.
La polémica también apunta a General Motors puesto que, tal como publica el medio The Verge, el fabricante estadounidense ha respaldado a Lordstown Motors y, de hecho, le prestó 40 millones de dólares para que comprara una planta que GM había cerrado hace un tiempo. Además, GM también invirtió alrededor de 75 millones de dólares en la start-up.
Después de la polémica, Lordstown salió al paso señalando que “compartiremos una declaración completa y exhaustiva en los próximos días, y cuando lo hagamos refutaremos absolutamente el informe de Hindenburg Research”.