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Salón del Automóvil de Ginebra suspendió su edición 2022 ante las dificultades del sector por la escasez de semiconductores y lo aplazó a 2023, anunciaron sus organizadores.
La "crisis de los chips electrónicos" durará probablemente hasta el año siguiente reconoció Sandro Mesquita, director general del salón en comunicado. Añadió que "en estos tiempos de incertidumbre, muchas marcas no pueden comprometerse a participar en una feria profesional".
Esta cita para el sector del automóvil debía celebrarse del 19 al 27 de febrero de 2022.En una entrevista en la revista suiza Agefi, Mesquita había explicado el lunes recién pasado que el salón sería una versión reducida, con unas cincuenta marcas previstas
para iniciar el evento tras dos años de ausencia.Pero frente a las consecuencias directas de la pandemia de COVID-19, las restricciones de viajes, y las consecuencias indirectas con la crisis de los semiconductores, "
quedó claro que era necesario aplazar el salón", declaró Mesquita en el comunicado. Con la escasez de semiconductores, "los constructores de automóviles tienen nuevas prioridades que deben resolver", indicaron los organizadores.
Ahora el objetivo es usar
"todo el potencial de la plataforma" para la edición 2023, indicaron los organizadores.