Tesla notificó a los reguladores y la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés), que ya está al tanto de la situación, y se habría puesto en contacto con los propietarios para arreglar el asunto.
En definitiva, se retirarán 355.000 vehículos del Model 3, por fallas en la constante apertura y cierre del maletero, lo cual podría dañar un cable de la cámara del espejo retrovisor. Al respecto, la NHTSA informó que desde Tesla estimaron que solo 1 % de los vehículos retirados presentan el problema reportado.
El otro llamado involucra a casi 120.000 vehículos del Model S, en los que se presenta un problema de ensamblaje de la cerradura del capot, que es lo que estaría provocando la apertura involuntaria. Un estimado del 14 % de los vehículos retirados tienen el problema, según lo reportado por la agencia.
“Si el cierre principal se suelta de pronto y el cierre secundario no está enganchado, el capot podría abrirse inadvertidamente obstruyendo la visibilidad del conductor, incrementando el riesgo de choque”, dijo la NHTSA.
Hasta el momento, Tesla no tiene conocimiento de choques, lesiones o muertes relacionadas a los problemas con sus autos Model 3 y Model S.
Esto no sería la única investigación que habría cursado la firma del magnate, anteriormente la NHTSA habría cuestionado la decisión Tesla de permitir la reproducción de juegos en las pantallas de los automóviles, mientras están en movimiento. Posteriormente, Musk habría acordado eliminar esta configuración para evitar accidentes en la ruta.