La llegada del auto eléctrico ha forzado a la industria automotora a modificar y adaptar fábricas y maquinarias, la compañía SEAT no ha sido la excepción. No es nuevo el hecho de que el vehículo eléctrico sea más sencillo de fabricar. Lleva en torno a un 25-40% menos de piezas y las horas de fabricación que necesita son un tercio menos que los actuales coches de combustión que se ensamblan en SEAT Martorell.
La compañía ha comunicado a los sindicatos que hay una necesidad de aprovechar los próximos cinco años, hasta que llegue de lleno la fabricación neta de vehículos eléctricos, “reorganizarnos y asegurar una adaptación progresiva", según indica SEAT a Efe. En este escenario, la empresa ha afirmado que “la transformación a producir coches eléctricos conlleva una reducción del 30% de horas de fabricación".
Añaden que esta realidad no tiene que “derivar en el 30% de reducción de la plantilla". En sentido, la dirección asegura que está trabajando para aumentar los volúmenes de producción en los próximos años “y poder compensar parcialmente esta disminución". Aunque la compañía ha intentado calmar los ánimos, los sindicatos desconfían, ellos aseguran que la producción de autos eléctricos pequeños de las marcas Cupra, Volkswagen y Skoda no sería suficiente. De hecho, los planes del grupo Volkswagen prevén una producción de unas 800.000 unidades entre las plantas de Martorell y de Pamplona.
Uno de los indicadores más usados para medir la salud del auto eléctrico y su evolución es el empleo. Aunque no todo son buenas noticias para los trabajadores del sector, de los últimos informes se extrae que el fin de los motores de combustión destruirá empleos que los vehículos eléctricos recuperarán.
Los sindicatos de la empresa ya comenzaron las negociaciones de un nuevo convenio colectivo, pero los trabajadores no ven a futuro una salida optimista. Han repudiado la posible reducción de personal, más cuando están plenamente implicados con la empresa como lo demuestra que se hayan negociado sucesivos ERTE, el actual hasta junio, debido a la crisis del suministro de semiconductores.
En tanto, fuentes sindicales hablan de una pérdida de empleo de 2.000 personas, lo que superaría más de un 10%. Por el momento, el presidente del comité de empresa y miembro del consejo de supervisión del grupo Volkswagen, Matías Carnero, señaló que desde los sindicatos han emplazado a la empresa “a que cuantifique el excedente laboral en la próxima reunión y a que detalle su plan industrial” y han publicado una nota aclaratoria sobre las últimas reuniones llevadas a cabo con la empresa.
