Con este anuncio, Ferrari y Lamborghini han seguido los pasos de otras grandes marcas de la industria automovilística, como Volkswagen, Porsche, Chevrolet o Ford. Además de la suspensión de sus negocios en Rusia, Ferrari ha paralizado también la producción de vehículos destinados al mercado ruso hasta nuevo aviso.
El CEO de Ferrari, Benedetto Vigna, señaló que “estamos del lado de todos en Ucrania afectados por esta crisis humanitaria en curso. Si bien esperamos un rápido retorno al diálogo y a una solución pacífica, no podemos permanecer indiferentes ante el sufrimiento de todos los afectados”.
Además de anunciar el cese de sus negocios con Rusia, ambas compañías se comprometieron a realizar donaciones para ayudar a los desplazados por la guerra en Ucrania. Por su parte, Ferrari donó un millón de euros a la causa, Laborghini también aseguró que haría su respectiva donación, aunque aún no se conoce el monto.
Las ayudas humanitarias serán enviadas directamente a la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), un socio de larga data del Grupo Volkswagen. Por su parte Vigna señala que “estamos haciendo nuestro pequeño papel junto a las instituciones que están brindando un alivio inmediato a esta situación. Financiará proyectos humanitarios internacionales que apoyen a Ucrania, así como iniciativas locales centradas en la recepción de refugiados en la región italiana”.
En tanto, Lamborghini también ha comunicado que “Automobili Lamborghini está profundamente entristecido por los acontecimientos en Ucrania y observa la situación con gran preocupación. Esperamos un rápido fin de las hostilidades y un retorno a la diplomacia”.
Las firmas deportivas no son las primeras marcas que han tomado acciones a modo de protesta contra Rusia, También Ford, Porsche o Volkswagen han paralizado sus producciones y negocios en este país sin importar el daño a la industria.