La iniciativa es parte de un programa existente llamado Bruxell’Air, que se lanzó originalmente en 2006, que consiste en otorgar un bono de movilidad sostenible a los residentes de la región, con el propósito de revertir la contaminación. Inicialmente, el monto entregado era de 500 euros, ahora fue aumentado a 900 euros.
El monto del bono se entregará en función de los sueldos anuales de la persona u hogar, siendo mayores para quienes reciben ingresos bajos o en situación de discapacidad.
Por ejemplo, un ciudadano que viva solo y gane hasta € 37.600 anuales, o personas en situación de discapacidad recibirán el máximo. Mientras que, aquellos que tengan remuneraciones de hasta €75.100 acceden a una subvención de hasta €500.
Una vez que las personas reciben su bono, pueden elegir si gastarlo en una bicicleta equipada de hasta 230 euros, una suscripción de transporte público de un año, o una membresía para un servicio de auto o bicicleta compartido.
Sobre la iniciativa, el Ministro de Bruselas para la Transición Climática y el Medio Ambiente, Alain Maron, mencionó que: “El objetivo de este bono es animar a los automovilistas de Bruselas a renunciar a su coche en favor de medios de transporte más respetuosos con el medio ambiente: transporte público, bicicleta, caminar y coche compartido”.
“Nos aseguramos de prestar especial atención a los hogares desfavorecidos y a las personas con movilidad reducida, porque queremos permitir que todos los habitantes de la ciudad hagan la transición paulatinamente hacia una movilidad más sostenible”.