El gigante alemán de la industria automotriz Volkswagen proyectó que la crisis generada por la escasez mundial de microchips se podría extender hasta más allá del próximo año.
El director financiero del grupo automotriz, Arno Antlitz, dijo en una entrevista al diario alemán Boersen-Zeitung que “es poco probable” que la oferta global mundial de semiconductores pueda en un corto plazo dar respuesta a la creciente demanda.
“Es probable que la escasez estructural solo se resuelva en 2024”, sentenció Antlitz al ser consultado sobre la crisis de microchips generada tras el estallido de la pandemia del covid-19.
La falta de arneses de cables de Ucrania también estaba causando la cancelación de algunos turnos, dijo Antlitz, incluso cuando la compañía estaba estableciendo nuevas relaciones con proveedores para obtener el componente de otros países.
Cuando se le preguntó cómo podrían usarse los fondos de una posible oferta pública inicial de Porsche AG, planificada para fin de año, para reforzar las finanzas de Volkswagen, Antlitz dijo que el dinero podría ayudar a financiar la unidad de software del fabricante de automóviles y sus planes de producción de baterías.
"Solo aquellos que pueden trazar un mapa de su cadena de suministro de baterías tienen la ventaja de escalar en electromovilidad. Asegurar la cadena de suministro viene con eso. Una oferta pública inicial de Porsche podría darnos mucha más flexibilidad para financiar esto", dijo Antlitz.
BMW: se extenderá a 2023
Por su parte, el presidente ejecutivo de BMW, Oliver Zipse, reconoció que todo apunta que la crisis de semiconductores se extenderá durante todo 2023.
En una entrevista con el periódico Neue Zuercher Zeitung, el alto ejecutivo dijo: “todavía estamos en el apogeo de la escasez de chips” y proyectó que los primeros signos de mejora se podría sentir recién el próximo año.
“Espero que comencemos a ver mejoras a más tardar el próximo año, pero aún tendremos que lidiar con una escasez fundamental en 2023”, dijo Zipse.
