El fabricante de autos alemán Volkswagen decidió finalmente abandonar parte importante de sus actividades en Rusia y terminar sus operaciones en la planta de Nizhny Novgorod. la que ha tenido operativa desde hace casi una década gracias a una sociedad con el grupo local Gaz Group.
La noticia fue confirmada por el diario ruso "Kommersant", medio que informó que la marca germana ya se puso en contacto con los cerca de 200 trabajadores de la planta a quienes les comunicó su decisión, adoptada como resultado de la guerra en Ucrania.
En la publicación se indica que Volkswagen les ha ofrecido a sus trabajadores abandonar de forma voluntaria sus puestos de trabajo a cambio de seis meses de sueldo.
La planta de Nizhny Novgorod está fuera de operaciones desde marzo pasado y todo apunta que su reactivación no se logrará a corto plazo, especialmente luego que la Unión Europea incluyera a Oleg Deripaska, uno de los dueños del socio ruso de Volkswagen, en su lista de sanciones para presionar al gobierno de Vladimir Putin a que ponga fin a la incursión militar en Ucrania.
De acuerdo a los sindicatos de trabajadores de la planta, según recoge 'Kommersant', Volkswagen ofreció entregar los seis salarios completos a los trabajadores que acepten la baja voluntaria antes del 17 de junio próximo.
Para aquellos que esperen hasta el 29 de junio, añade el reporte, la compensación será únicamente de cinco salarios.
Según el diario ruso, la empresa con sede en Wolfsburg también ha informado a sus socios de que no habrá ningún tipo de producción local en Rusia durante 2022. Esto incluye a la propia planta que tiene la empresa en Kaluga y que emplea a cerca de 4.000 personas.
