Responsables de la industria automovilística de Irán, Rusia y Turquía estudian la posibilidad de diseñar y fabricar conjuntamente automóviles para hacer frente a las sanciones internacionales impuestas a Moscú y Teherán que han frenado su producción.
Mohammadreza Najafi-Manesh, jefe de la asociación de fabricantes de piezas automóviles de Irán dijo a la agencia de noticias local IRNA que se avanza en un amplio acuerdo entre los tres países para potenciar la industria del automóvil.
"Existe una gran posibilidad de cooperación tripartita entre los fabricantes de automóviles y los proveedores de los tres países", dijo el representante de los proveedores de autopartes.
"Estos tres países pueden captar un gran mercado para sus productos", añadió Najafi-Manesh, argumentando que podrían dirigirse a una población de "al menos 800 millones si se incluyen las regiones vecinas".
Rusia, objeto de sanciones de los países occidentales tras su invasión de Ucrania, pidió en mayo a Irán que le suministre componentes clave a los que ya no podía acceder.
"Fabricar todas las piezas de este coche (...) evitar las transferencias de divisas para suministrar piezas de recambio y la existencia de mercados de exportación son algunas de las ventajas de este proyecto", subrayó Najafi-Manesh.
La idea fue planteada primero por Turquía y Rusia estaba "interesada", agregó.
Irán sufre también sanciones económicas impuestas por Estados Unidos desde 2018, después de que Washington abandonara de manera unilateral el acuerdo nuclear iraní.