General Motors superó a Toyota Motor Corp en la venta de automóviles en el mercado estadounidense durante el segundo trimestre del año en curso, imponiéndose en un escenario marcado por la escasez mundial de microchips y las interrupciones en las cadenas de suministros redujeron las capacidades de los fabricantes de automóviles para satisfacer la demanda acumulada.
GM perdió su corona como líder de ventas en Estados Unidos el año pasado por primera vez desde 1931 ante Toyota. No obstante, el buen desempeño del gigante asiático comenzó a decaer a medida que sus reservas de microchips se fueron agotando.
Solo este año Toyota ha sido uno de los fabricantes de vehículos más afectados por la crisis de los semiconductores, a lo que se sumaron los cierres decretados en China por brotes del covid-19, lo que también golpeó su línea de suministros.
La industria automotriz de Estados Unidos está luchando para mantenerse al día con la demanda acumulada de automóviles nuevos por parte de los consumidores.
Esto volvió a ser evidente el viernes cuando GM dijo que tenía casi 100.000 vehículos esperando más piezas, lo que la obligó a ofrecer un débil pronóstico de ganancias para el segundo trimestre.
"Los volúmenes mayoristas de vehículos del segundo trimestre se vieron afectados por la actual escasez de suministro de semiconductores y otras interrupciones de la cadena de suministro, principalmente en junio", dijo GM.
Sin embargo, el fabricante de automóviles de Detroit mantuvo su perspectiva de ganancias para todo el año, ya que espera vender esos vehículos a los concesionarios antes que comience 2023.
GM vendió más de 7.300 vehículos eléctricos en el trimestre, incluida la camioneta GMC Hummer, cuya producción aumentará gradualmente en la segunda mitad.
Se espera que la compañía venda la mayor cantidad de vehículos nuevos en el trimestre, según Cox Automotive, ya que las interrupciones en toda la industria reducen el inventario de otros fabricantes de automóviles importantes.