El BMW i3 se transformó en todo un ícono de la marca alemana en cuanto a autos eléctricos se refiere. Mostrado por primera vez en 2011 y lanzado oficialmente en 2013, el coche logró miles de ventas en más de 70 países durante sus años de producción, historia que sin embargo llega a su final.
Esto porque la producción del popular modelo finalizó su ciclo para dar paso a un nuevo crossover 100% eléctrico con el que la marca europea busca apuntar a un nuevo público.
“Fue una fuente de inspiración, un impulsor de la innovación, un pionero del placer de conducir localmente libre de emisiones: la lista de atributos que han acompañado al primer automóvil de producción en serie grande de BMW Group con propulsión totalmente eléctrica desde su debut en 2013 es larga”, destacó la firma.
Tomando en cuenta la importancia del vehículo es que BMW quiso homenajear al i3 con una última partida de 18 unidades que cuenta con un color especial que lo diferencian de las otras 250 mil unidades que se produjeron.
Según informó la prensa internacional, cada uno de los 18 ejemplares lucen el mismo acabado en oro galvánico y negro como homenaje al éxito que cosechó durante más de 8 años.
Cabe destacar que durante sus años de vida el vehículo exhibió potencias que van entre los 170 caballos y 184 en su versión deportiva i3S. En términos de autonomía, el modelo llegó a alcanzar los 240 kilómetros con una sola carga, posicionándose dentro de la media de su época.
"El BMW i3 es un verdadero pionero y el epítome del espíritu pionero", dijo hace unas semanas Milan Nedeljkovic, miembro del Consejo de Administración de Producción de BMW AG. "Gracias al BMW i3, la planta de Leipzig se convirtió en el lugar de nacimiento de la movilidad eléctrica en BMW".