La multinacional Bosh, empresa con sede en Alemania y reconocido socio de la industria automotriz como proveedor de autopartes y tecnología, comenzó a realizar pruebas en carretera de dos furgonetas modificadas para operar con pila de combustible de hidrógeno.
El objetivo del proyecto, indicaron en un comunicado, es recoger datos detallados para el posterior desarrollo de este sistema de propulsión más amigable con el medio ambiente y que asoma como una alternativa a las populares pilas de iones de litio, ampliamente utilizadas en los vehículos eléctricos.
El miembro del consejo de administración de Bosch y presidente del área de Mobility Solutions, Markus Heyn, ha destacado el potencial de la pila de combustible, indicando que esta tecnología permite "amplias autonomías y tiempos de repostaje cortos, lo que hace que los trayectos largos sean más económicos".
"Con ambas furgonetas estamos ampliando nuestra comprensión del sistema y demostrando que la pila de combustible también puede ser una solución adecuada para los vehículos comerciales ligeros", ha comentado Heyn.
Bosch se ha aliado en este proyecto con ABT eLine, que ha diseñado y transformado los vehículos junto con Bosch Engineering. Las furgonetas se pueden probar en una pista de pruebas de la IAA Transportation de Hannover (Alemania).