El gobierno alemán está empeñado en potenciar la transición de su industria automotriz hacia la electromovilidad y para ello anunció que en los próximos tres años invertirá alrededor de 6.300 millones de euros para aumentar el número de puntos de carga para vehículos eléctricos en el país.
Las obras se hacen necesarias, indicaron, tomando en consideración que cada vez son más los consumidores que dejan de lado los vehículos con motores convencionales para escoger un cero emisiones, por lo que se necesitarán más estaciones de recarga no solo en las ciudades, sino también en las carreteras donde se estima que deberían existir al menos un punto de repostaje cada 60 km.
En ese contexto, el ministro de Transporte alemán, Volker Wissing. presentó esta jornada un "plan maestro" para mejorar la infraestructura de carga y que horas antes había sido aprobado por el gabinete del canciller Olaf Scholz.
"No somos un centro de producción de automóviles cualquiera, sino uno de los principales del mundo. por eso es importante para nosotros que lo que estamos preparando tenga éxito", declaró el ministro, Volker Wissing, a los periodistas en Berlín.
"Necesitamos una expansión de la infraestructura para estaciones de carga, que satisfaga la demanda y que sea fácil de usar", añadió el jefe de la cartera de Transporte.
La participación de mercado de los automóviles eléctricos en Alemania ha aumentado un 24,8% de manera anual y a la fecha representan un 14,6% de todas las matriculaciones de vehículos nuevos en ese país según cifras oficiales de la Oficina Federal de Vehículos Automotores.
En esa línea, se indicó que en la actualidad Alemania cuenta con unas 70 mil estaciones de carga en el país. No obstante, de ellas sólo 11 mil son de carga rápida.
Estas cifras, indicaron, no son suficientes para satisfacer la demanda actual y será aún menos a medida que aumente la cantidad de vehículos eléctricos disponibles. Además, hay una enorme disparidad en la disponibilidad de estaciones de carga en zonas urbanas y en zonas rurales.
Alemania aspira a tener un millón de estaciones de carga para vehículos eléctricos para 2030.
A fin de incrementar la cantidad de estaciones de carga, el gobierno federal, entre otras cosas, proveerá terrenos, especialmente los adyacentes a las carreteras, para la construcción de estaciones eléctricas.
A los dueños de los automóviles eléctricos se les ofrecerá además subsidios para instalar paneles de energía solar y baterías en sus casas para recargar sus vehículos durante la noche y con energía renovable.