El presidente Vladimir Putin instó al gobierno ruso a controlar los precios de los automóviles luego que un líder de la industria asegurara que las sanciones occidentales impuestas por la guerra en Ucrania podrían hacer que las ventas anuales caigan por debajo de un millón de ejemplares nuevos por primera vez desde que comenzaron los registros.
Las colocaciones de automóviles en ese país han caído más del 60% en lo que va del año, y pueden terminar siendo menos de una cuarta parte de lo que eran hace una década, según Maxim Sokolov, jefe del principal fabricante de automóviles de Rusia, Avtovaz, quien aseguró que "nunca antes nos habíamos enfrentado a un desafío tan amplio y a gran escala".
"El año pasado fueron un poco más de 1,6 (millones de autos comercializados); si Dios quiere, este año serán entre 670.000 y 700.000", aseguró el ejecutivo.
Estas cifras se comparan con las ventas de alrededor de 3 millones de unidades registradas en 2012, antes de experimentar una caída inducida en parte por las sanciones internacionales aplicadas contra Rusia en 2014 tras tomar posesión de la zona ucraniana de Crimea.
Gran parte de la caída en las ventas de automóviles este año, indicaron, se debe a la retirada de fabricantes extranjeros como Renault y Mercedes-Benz y al colapso de la demanda debido a una movilización masiva por el conflicto bélico.
A ello se suma algo más complejo y que apunta a una caída en el nivel de vida de los consumidores rusos que se enfrentan a precios más altos de los vehículos debido a la dificultad que tienen los fabricantes locales para obtener componentes en el extranjero.
De hecho, el último modelo de Lada salió de la línea de producción y llegó a los concesionarios rusos sin airbags ni frenos antibloqueo.
Según una nota publicada por Reuters, Putin reconoció frente a altos funcionarios que la situación "no era fácil" y pidió al gobierno que estudiara la posibilidad de hacer que los automóviles fueran más asequibles, sugiriendo que los precios se estaban elevando de manera injusta.
“Me gustaría llamar su atención sobre la necesidad de un control constante sobre los precios, para que bajo estas dificultades, de las que todos somos conscientes, incluida la logística, nadie abuse o eleve injustificadamente los precios de los vehículos de carretera. Espero que tanto usted como el Servicio Federal Antimonopolio estén haciendo esto todo el tiempo", dijo.