Los ministros de la Unión Europea advirtieron que se está acabando el tiempo para llegar a un acuerdo con Estados Unidos a fin de modificar la ley que entrará en vigencia en enero próximo y que sólo otorga subsidios estatales a quienes compren autos eléctricos de fabricación local.
La UE argumenta que la Ley de Reducción de la Inflación, de 430 mil millones de dólares, podría convertir a Estados Unidos en un líder mundial en el mercado de vehículos eléctricos a expensas de Europa, por lo que se negocia una excepción para los productos del bloque de países, tal como ya se acordó con los productos canadienses y mexicanos.
El ministro checo de industria y comercio, Jozef Sikela, dijo que los 27 miembros de la UE estaban preocupados y acordaron que el problema debía resolverse rápidamente.
Las dos partes lanzaron un grupo de trabajo conjunto a principios de noviembre para abordar el problema.
El comisionado de Comercio de la UE, Valdis Dombrovskis, dijo en una conferencia de prensa que él y la jefa de tecnología de la UE, Margrethe Vestager, evaluarían el progreso cuando se reúnan con sus homólogos estadounidenses en el Consejo de Comercio y Tecnología (TTC) de EE.UU. y la UE el 5 de diciembre.
"Estas no son discusiones fáciles, pero deben producir soluciones concretas", dijo, y agregó que en el contexto geopolítico actual, con la guerra de Rusia en Ucrania, los socios deben construir alianzas en sectores importantes como las energías renovables y las baterías.
Algunos ministros expresaron anteriormente la esperanza de una solución para la reunión del 5 de diciembre, pero Dombrovskis dijo que el grupo de trabajo debería continuar su trabajo más allá de esa fecha.