China es a la fecha el mercado automotriz más grande de todo el mundo y uno de los más avanzados cuando se habla de la adopción de los vehículos eléctricos, transición en la que quedaron empantanadas las marcas globales, siendo superadas por fabricantes locales que ahora lideran segmentos considerados como clave.
Este rápido ascenso se explica en gran medida por el lanzamiento de nuevos y variados modelos de propulsión eléctrica que poco a poco han ganado participación en esa plaza y en el extranjero.
El mayor ganador en esta carrera ha sido hasta ahora el fabricante chino BYD, empresa que no solo utilizará el Salón del Automóvil de Shanghái para lanzar un nuevo modelo 100% eléctrico en formato SUV con un elegante diseño.
Tan solo este año, indican informes de prensa, las ventas de la empresa se han incrementado un 69% en lo que va del año, alcanzado una participación total de mercado del 11%, más que marcas mundiales como Volkswagen o Toyota, según un análisis de ventas.
“La estratificación de este mercado en claros ganadores y perdedores se está volviendo clara”, dijo Bill Russo, fundador de la consultora Automobility, en una nota emitida el martes. "Y hay muy pocos ganadores y muchos perdedores", agregó.
Las ventas de automóviles de pasajeros de China cayeron un 13% en el primer trimestre, según muestran los datos de la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China.
Pero las ventas de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, un área donde ahora dominan los fabricantes de automóviles chinos liderados por BYD, aumentaron un 22%. Las ventas de vehículos de combustión interna cayeron por un margen casi igual.
El resultado ha sido un doble golpe para Volkswagen, General Motors, Honda y Nissan, cuyas ventas han bajado y sus cuotas de mercado también.
