Tener un superdeportivo ya es lujo que no muchos pueden darse, pero adquirir un Ferrari Enzo que perteneció a un ex campeón de la Fórmula Uno con tan solo 4.800 km recorridos es llevar las cosas a otro nivel de exclusividad y, precisamente, eso ocurrirá el próximo 8 de junio.
Ese día la casa de subastas Mónaco Car Auctions realizará un evento especial donde saldrán al ruedo cerca de 40 unidades de Maranello, entre las que se cuenta el Ferrari Enzo del piloto español Fernando Alonso, ganador de la F1 en 2005 y 2006.
El exclusivo Cavallino Rampante llegó a manos del español en 2011 durante su segunda temporada como piloto de Ferrari en la máxima categoría motor, escudería que defendió hasta 2014.
El Ferrari Enzo es considerado por muchos como uno de los superdeportivos más espectaculares que se han fabricado durante las últimas décadas y del cual solo se hicieron 400 unidades, la última ensamblada en 2004 para ser regalada al Papa Juan Pablo II.
Si ese ejemplar ya era especial, el de Alonso lo es aún más para los coleccionistas ya que según la certificación de Ferrari Classiche el Cavallino Rampante del español es un Scocca nº1, lo que significa que su chasis es el número 1 de los 400 ejemplares existentes de este modelo.
Fabricado entre 2002 y 2004 el Enzo fue el superdeportivo que retomó la senda del Ferrari F40 y el Ferrari F50, convirtiéndose en la insignia de la marca durante los años venideros.
Su chasis monocasco está hecho de fibra de carbono y es propulsado por un motor V12 atmosférico de 6.0 litros que entrega 660 CV con un par máximo de 657 Nm asociado a una transmisión secuencial de seis velocidades con levas en el volante que envía toda esa fuerza a las ruedas traseras. Toda una novedad en los deportivos de ese momento.
Gracias a esta configuración el superdeportivo puede ir de 0 a 100 km/h en 3,65 segundos y alcanzar una velocidad máxima de más de 350 km/h, números que hoy no parecen ser tan impresionantes, pero al momento de su estreno era toda una novedad.
De hecho, en su fase de desarrollo la marca italiana contó con la colaboración del legendario Michael Schumacher, quien era piloto de la escudería italiana en esa época.
Por el momento se desconoce las razones que llevaron a Fernando Alonso a tomar la decisión de desprenderse de esta unidad, lo único claro, indican medios especializados, es que no será económico y no se descarta una “guerra” de ofertas.