No es extraño que los desarrolladores de los simuladores de carreras de autos, como Gran Turismo o Assetto Corsa, busquen replicar hasta en el más mínimo detalle el mundo real a fin de lograr una mejor experiencia. Lo que sí es llamativo es que se intente llevar a la realidad los complejos formatos audiovisuales de los videojuegos de automovilismo, esfuerzos que últimamente han arrojado impresionantes resultados.
Así al menos se puede comprobar con un video subido a Youtube por LexiMount donde se aprecia un Subaru WRX STi de rally con motor de Ferrari corriendo a toda velocidad sobre una pista de tierra mientras se oye la voz en off de la navegante cantando las curvas de la ruta.
Lo impresionante del video es que toda esa secuencia es tomada por una cámara que va detrás del auto de rally separada por una distancia razonable, lo que permite hacer un plano general del vehículo en picado, tal como se ve en los videojuegos en cámara de seguimiento.
El resultado audiovisual es tan innovador como impresionante, al punto que hace borrosa la línea entre lo real y lo ficticio.
A la fecha las transmisiones de los deportes motor habían intentado imitar este plano utilizando veloces drones de carrera con cámaras de alta definición consiguiendo interesantes resultados, pero con las imprecisiones propias de un aparato a control remoto.
Todo gracias un “bastón selfie”
Sus creadores, explica el sitio motorpasión.com, consiguieron el registro gracias a un imaginativo sistema que fue definido como el "bastón selfie" más avanzado del mundo.
El efecto visual se obtiene con una cámara Insta360, capaz de ofrecer una visión de 360 grados, que va adosada a un extremo de este "bastón" llamado LexiMount y que ha sido desarrollado con la colaboración del campeón de Fórmula Drift Matt Field.
El “bastón selfie” extendido con la cámara integrada se engancha finalmente en el vidrio trasero del automóvil con una plataforma compuesta por cuatro ventosas de máximo agarre, quedando finalmente como una especie de antena. Esta posición permite crear el efecto de seguimiento similar a la de un videojuego, captando al vehículo desde atrás y en altura.
Si bien esta arquitectura ya ha sido usada, añade el reporte, sus desarrolladores fueron un paso más allá e integraron al soporte una rótula de base, diseño que permite que la cámara de 360 grados gire en la dirección opuesta a la del coche, captando así una imagen completa de este cuando enfrenta a toda velocidad las curvas.
Su funcionamiento es totalmente mecánico y se puede ajustar mediante amortiguadores y contrapesos, lo que ofrece además alternativas a los realizadores como optar por una toma estable o dar efectos de rebote, por ejemplo.
