Un avión dotado con un motor eléctrico que recibe energía de una pila de hidrógeno líquido, producido de manera sustentable, realizó a inicios de semana en Eslovenia lo que se considera el primer vuelo de larga distancia de una aeronave con estas características, según informaron las tres empresas que están detrás de este desarrollo y que es calificado como fundamental para establecer a futuro un transporte aéreo sin emisiones de carbono.
"Con el vuelo experimental del avión HY4 sentamos las bases para vuelos a grandes distancias sin emisiones", dijo el director de la firma alemana H2Fly, Josef Kallo, tras comunicar los resultados de la prueba.
(Avión H2Fly HY4)
Además de la compañía germana, el proyecto es respaldado por las empresas Air Liquide de Francia y Pipistrel de Eslovenia, las que concordaron en calificar este primer vuelo como "revolucionario" tras años de desarrollo.
Kallo añadió que se trata de un "momento crucial en el empleo del hidrógeno para la propulsión de aviones" y añadió que con esta aeronave para cuatro personas "hemos comprobado que el hidrógeno líquido es adecuado para vuelos sin emisiones", tanto para distancias medianas como para largas”.
Kallo agregó que gracias a este biocombustible se pudo además duplicar la distancia de vuelo que el avión puede lograr (1.500 kilómetros) comparado con los 700 alcanzados en 2016 con hidrógeno en gas.
El jefe de la empresa germana estimó que los primeros vuelos de aviones comerciales, con 40 pasajeros, pueden esperarse a finales de la actual década, al menos para viajes cortos en Europa.
El proyecto aeronáutico ha sido respaldado por inversores privados, el gobierno alemán, fondos europeos y la Universidad de Ulm (Alemania).