El sindicato del sector automotriz de Estados Unidos informó este lunes que la huelga progresiva iniciada el pasado 15 de septiembre se extendió esta jornada a una importante planta de Stellantis, en una nueva medida que aumenta la presión a los llamados “Tres Grandes de Detroit” para mejorar sus oferta en el marco de un nuevo convenio colectivo.
Según informó el United Auto Workers (UAW) -organismo que representa a unos 150.000 trabajadores del sector automotriz de las marcas Ford, GM y Stellantis de Estados Unidos- la decisión afecta a la planta de Stellantis en el estado de Michigan donde hay 6.800 trabajadores que fabrican las camionetas RAM.
La fábrica es considerada "la más grande y lucrativa" del grupo ítalo-franco-estadounidense y se emplaza en la localidad de Sterling Heights.
Con la suma de este complejo, el total de empleados paralizados en fábricas o oficinas de los llamados “Tres Grandes” superan los 40.000 funcionarios.
Shawn Fain, presidente del sindicato United Auto Workers, dio cuenta el viernes de "movimientos serios" en las negociaciones con Stellantis y General Motors para lograr nuevos convenios salariales.
"Estoy feliz de informar que, en las últimas 24 horas, vimos movimientos serios en Stellantis y GM", señaló Fain la semana pasada. Ford "continúa afirmando que no pueden darnos lo que solicitamos", añadió.
Pero el lunes por la mañana el sindicato indicaba "lagunas" persistentes en la última oferta de Stellantis (Chrysler, Jeep, Ram, Dodge, Peugeot) que obligan a tomar la medida.
"Aunque tiene la facturación más alta y las ganancias más altas (en América del Norte y en el mundo), los márgenes operativos más importantes y la mayor cantidad de liquidez, Stellantis se ubica por detrás de Ford y GM en cuanto a las demandas de los empleados y de UAW", destacó el sindicato en su comunicado.
El grupo presentó la "peor oferta" en materia de evolución salarial, remuneración de los trabajadores temporales y medidas de adaptación a la evolución del costo de vida, indicó la agremiación.