La seguridad es fundamental cuando se trata de escoger un vehículo y en ese contexto durante no poco tiempo se ha intentado establecer si existe una relación directa entre el color del automóvil y la mayor o menor posibilidad de sufrir un accidente de tránsito.
Para intentar desentrañar tal posibilidad la empresa de datos automotrices carVertical realizó un estudio donde logró establecer que sí existiría una relación entre la elección del color del vehículo y la posibilidad de sufrir un incidente vial.
En el reporte, explica una nota de AutoBild.es, se indica que ciertas tonalidades tienen una mayor propensión a estar involucrados en accidentes que otros, lo que sugiere una correlación entre la elección del color del automóvil y los hábitos de conducción de la persona.
Los resultados del estudio no dejan de llamar la atención ya que plantea que los ejemplares de color marrón o café se destacan como los más propensos a sufrir daños en accidentes, con un 51% de estos vehículos registrando incidentes de tránsito.
A estos le siguen los vehículos pintados de amarillos, cuyos propietarios a menudo buscan llamar la atención y que presentan un 50.6% de registros de daños, seguidos de cerca por los ejemplares de rojos, normalmente usado en modelos deportivos, con un 49.8%.
Estos colores (marrón, amarillo y rojo), agrega el informe, son normalmente elegidos por conductores que quieren destacar entre la multitud y que suelen estar asociados a un estilo de conducción más arriesgado.
Resulta curioso, precisan, que a pesar de su atractivo visual los colores llamativos tienden a tener un historial de accidentes más alto.
En contraste, los colores más seguros según el estudio son el gris y el blanco, con un 44.7% y un 44.5% de registros de daños en accidentes viales, respectivamente.
Estos colores tienden a estar involucrados en accidentes de tráfico con menos frecuencia, lo que podría estar relacionado con su mayor visibilidad en condiciones adversas.