Atrás quedaron los grandes lujos de un convertible con un exterior excéntrico, un panel de control con tecnología avanzada y asientos de cuero. La sostenibilidad, la sencillez y funcionalidad, son elementos que destacan en la actualidad.
Descapotable, eléctrico y el más chico del mundo, esas son las características del Wuling Mini EV Convertible, un modelo único en su especie y que mide 3,1 metros de largo.
En su interior, destaca por su aspecto minimalista, un pequeño cuadro de instrumentos, tiene mandos manuales del aire acondicionado y una pequeña pantalla para el equipo de radio. Curiosamente, los pedales están situados casi en el centro del coche.
Otra de las particularidades de este vehículo tiene relación con el acceso al maletero, ya que solo se puede llegar a él mediante el asiento del conductor, abriendo una especie de bolsillo desde el que se puede acceder al compartimento.
Según destacan, el Wuling funciona con una batería de 26,5 kWh, la cual alimenta un motor eléctrico de 40 CV. Este modelo está hecho para recorrer de manera autónoma unos 280 km, aunque dado su característica de descapotable, la cifra puede empeorar considerablemente debido a la aerodinámica limitada del vehículo.
Sumado a lo anterior, este es uno de los modelos eléctricos chino más económico, con un precio de 12.500 euros.