La multinacional Nissan anunció este martes una inversión de 2.800 millones de reales (unos 571,4 millones de dólares) en la producción de dos nuevos modelos SUV en la fábrica que tiene en la ciudad brasileña de Resende y que distribuirá en toda América Latina.
La inversión fue anunciada por el consejero delegado global de Nissan, Makoto Uchida, en una ceremonia en la fábrica de Nissan en Resende, ciudad en el sur del estado de Río de Janeiro que se ha convertido en un importante polo automotriz.
El ejecutivo explicó que el nuevo valor implica en una inversión adicional de 1.500 millones de reales (unos 306,1 millones de dólares) a los 1.300 millones de reales (unos 265,3 millones de dólares) que ya habían sido anunciados el año pasado para el proyecto.
Uno de los nuevos modelos SUV que la multinacional de origen japonés producirá a partir de 2025 en Brasil es la versión utilitario deportivo del todoterreno compacto Kicks, el único vehículo fabricado actualmente en la planta y que cuenta con una importante demanda tanto en Brasil como en otros países sudamericanos.
El otro modelo será un SUV de mayor porte que será totalmente desarrollado en Brasil, así como lo fue el Kicks, y que igualmente tendrá como destino 20 mercados de América Latina.
De los cerca de 590.000 vehículos producidos por Nissan desde que inauguró el Complejo Industrial de Resende en 2013, 85.000 tuvieron como destino otros países de la región.
Una parte de las nuevas inversiones será destinada al montaje de una línea de producción de un motor turbo flex para los vehículos que serán lanzados.
Uchida anunció igualmente acuerdos para que cuatro nuevos fabricantes de piezas se instalen en el complejo industrial para atender la demanda de Nissan para sus nuevos vehículos.
El ejecutivo explicó que Brasil es una de las regiones estratégicas en los planes de Nissan para crecer globalmente y que el objetivo de la empresa es doblar su participación en el mercado brasileño, desde el actual 3,4 % hasta cerca del 7 %.