BYD, el principal fabricante mundial de vehículos enchufables y el segundo mayor fabricante de autos eléctricos después de Tesla, sabe que para ser líder en el mercado mundial de los cero o bajas emisiones debe controlar el transporte mundial de las unidades y para eso ya ordenó la construcción de los dos primeros, de al menos seis, buques de carga, denominados Ro-Ro, que tendrán la capacidad de transportar miles de unidades a la vez.
Durante los primeros nueve meses de 2023, BYD vendió más de dos millones de vehículos híbridos o 100% eléctricos, siendo estos últimos más de la mitad del total.
Estos enormes barcos, reporta una nota del sitio motorpasion.com, no solo llevarán los vehículos de BYD, que van desde citycars hasta camiones y autobuses, sino que también transportarán vehículos fabricados en China por otras marcas automotrices.
Los primeros dos barcos, indican los reportes, podrán transportar hasta 7.000 unidades, eléctricos o no, con dimensiones cercanas a los 200 metros de eslora y una velocidad máxima de 34 km/h.
El reporte de prensa añade que BYD busca de esta manera independizarse del transporte de terceros y especialmente de navieras occidentales.
La estrategia de BYD no solo le permitirá enviar sus productos directamente a otros mercados sino que también ofrecer a otros fabricantes de vehículos que operan en China servicios globales de transporte. La empresa se convierte así en una combinación única de fabricante de automóviles, armador y proveedor de servicios logísticos.
Esta incursión de BYD en el transporte marítimo no es única en la industria automotriz china. En julio pasado, SAIC Motor, el fabricante estatal de automóviles que posee la marca MG, se asoció con COSCO y Shanghai International Port Group para crear Guangzhou Yuanhai Car Carrier Transportation, dedicada al transporte marítimo de vehículos.
China busca expandir su capacidad de transporte de vehículos para aumentar la presencia mundial de su industria automotriz.