El fabricante de automóviles japonés Daihatsu nombró esta jornada a un veterano de su empresa matriz Toyota para reemplazar a su presidente como parte de las acciones destinadas a reparar el daño causado tras conocerse que la compañía manipuló por años las pruebas de seguridad de poco más de 60 modelos.
Las malas prácticas quedaron al descubierto luego que una auditoría externa encontró violaciones que habían persistido durante décadas, como realizar pruebas en un solo lado de un automóvil cuando había que probar ambos lados.
Los nombramientos de un nuevo presidente, vicepresidente ejecutivo y director resaltan la determinación de Toyota de desempeñar un papel de liderazgo en las reformas en su filial de propiedad absoluta, Daihatsu.
Masahiro Inoue, quien ahora supervisa el negocio de Toyota en Sudamérica, se convertirá en presidente de Daihatsu a partir de marzo, dijo el director ejecutivo de Toyota, Koji Sato, a los periodistas en Tokio.
Por su parte, Masanori Kuwata, ahora en Lexus International Co., la marca de lujo de Toyota Motor Corp, se convierte en el vicepresidente ejecutivo de Daihatsu, según los cambios anunciados este martes. Finalmente Keiko Yanagi, subdirectora de Toyota, fue nombrada directora de Daihatsu.
Inoue se disculpó con los clientes, proveedores y distribuidores de Daihatsu y dijo que sabe cómo escuchar para ganarse la confianza de la gente gracias a sus décadas de trabajo en el extranjero.
“Uniremos nuestros corazones y aspiramos a un nuevo comienzo”, dijo Inoue.
Los nombramientos ponen de relieve la determinación de Toyota de desempeñar un papel de liderazgo en las reformas en su filial y evitar nuevos escándalos.
Inoue dijo que en abril se dará a conocer un plan de negocios, incluida una nueva dirección gerencial.
El gobierno japonés ha ordenado que se detenga la producción de una serie de modelos Daihatsu hasta que las pruebas se puedan realizar correctamente y se aprueben. Las compañías dijeron que ya se ha reanudado parte de la producción, pero que el trabajo en otros modelos llevará tiempo.
No se han reportado accidentes importantes en relación con las trampas, pero la noticia ha planteado serias dudas sobre la supervisión en Daihatsu y su empresa matriz Toyota.