El director general de Volkswagen, Oliver Blume, reconoció que sus autos eléctricos no pueden seguir el ritmo de la competencia local en China y manifestó que esperar una alta participación en ese gravitante mercado hoy resulta utópico.
En entrevista al periodico alemán FAZ, Blume declaró que quiere evitar establecer metas inalcanzables para su cuota de mercado en el gigante asiático, por lo que moderó las expectativas y aseguró que cualquier nivel cercano al 10% era "muy respetable" dada la agresiva competencia.
El alto ejecutivo de Volkswagen fue más allá y agregó que el segmento de autos eléctricos es tan exigente en China que es casi imposible “mantenerse en la cima de la tabla”, al menos en este momento.
Añadió que el panorama para la compañía debería mejorar en los próximos años con el lanzamiento de nuevos modelos cero emisiones que ayudarán a mejorar su posición en un mercado tan importante como el chino.
Aún así, Blume reiteró que por lo pronto Volkswagen "no debería tener expectativas utópicas (...) Si alcanzamos a largo plazo una cuota de mercado de dos dígitos en un mercado chino en rápido crecimiento, ya sería un objetivo muy respetable", dijo al citado periodico.
La participación de mercado general de Volkswagen en China cayó en 2023 un 14%, marcando una baja constante desde 2018, la que se da en paralelo a la aparición de fabricantes chinos de autos eléctricos que han restado participación de mercado a las marcas occidentales tradicionales.
El jefe de Volkswagen en China, Ralf Brandstaetter, dijo anteriormente que la marca alemana aspiraba a seguir siendo el principal fabricante de automóviles internacional en China, aunque el director financiero, Arno Antlitz, advirtió a finales del año pasado que podría perder participación en el mercado de vehículos eléctricos hasta que se lancen nuevos modelos.