El fabricante de autos surcoreano Kia dio a conocer sus ambiciosos objetivos para lo que resta de la década donde intentará estar en los puestos de avanzada en la carrera por la electrificación y llegar a 2030 con una venta estimada de 1,6 millones de unidades a batería (BEV).
Durante el “CEO Investor Day” realizado en Seúl, la compañía dijo que tiene proyectado invertir alrededor de 26.000 millones de dólares hasta 2028 para robustecer esta hoja de ruta con una proyección de venta total al finalizar la década de 4,3 millones de vehículos, independiente de su sistema motriz, es decir un incremento del 34,4% con respecto a los objetivos anteriores.
La compañía tiene como objetivo que los vehículos electrificados, incluyendo híbridos y eléctricos, constituyan el 58% de sus ventas totales para 2030. Este compromiso se refleja en su plan de expansión de la infraestructura de carga, con la construcción de miles de estaciones en Corea del Sur, Norteamérica y Europa.
Además de la electrificación, Kia pretende fortalecer su posición competitiva mediante una expansión inversora continua. Esto incluye mantener una razón de reparto de dividendos entre el 20% y el 35%, así como la compra y cancelación de acciones para maximizar el valor para los accionistas.
En términos financieros, Kia tiene como objetivo alcanzar ingresos cercanos a los 69.000 millones de euros en 2024, respaldados por la optimización del suministro global y el lanzamiento de nuevos modelos, como el EV3 y el sedán K4.
Mirando hacia el futuro, la compañía se centrará en cuatro directrices principales para sus productos: conectividad, vehículo autónomo, prestaciones y diseño. Se espera que estas áreas impulsen la innovación y mejoren la funcionalidad y seguridad de los vehículos de Kia, dijeron.
