Hace unas semanas Xiaomi dio un verdadero golpe en la industria automotriz al presentar su primer vehículo eléctrico con el que busca convertirse en una nueva opción dentro del mercado cero emisiones y, de paso, le puso presión a los fabricantes tradicionales.
De hecho, el vehículo bautizado como SU7 superó con creces la aceptación del mercado local en sus primeras 24 horas de venta, según confirmó la propia compañía.
Su diseño, tecnología y bajo precio en comparación con otros modelos a batería, son algunos de los atributos que llevaron al auto a acaparar todas las portadas internacionales durante su presentación.
También destacan sus motores eléctricos denominado de "súper potencia", un V6 o V8 según el modelo, y que ofrece una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,78 segundos, además de una velocidad punta de 265 km/h en su gama más alta. Cabe destacar que el auto se presenta en tres versiones, Standard, Pro y Max, con nueve colores, ofreciendo además en su versión de acceso una autonomía de hasta 700 kilómetros, cifra que se extiende hasta los 810 km, según el ciclo de homologación chino, en el modelo Max.
Ha sido tanto el interés y revuelo por el nuevo modelo que Xiaomi iniciará doble turno de producción para aumentar las entregas de su vehículo.
Según informó Europa Press, la compañía elevó el objetivo de ventas hasta las 120 mil unidades para este 2024.
“El grupo se ha fijado el objetivo de entregar hasta 120 mil vehículos este año y tiene previsto iniciar el doble turno de producción en sus fábricas en junio”, indicó la empresa en un comunicado.
De esta forma Xiaomi busca remecer a la industria automotriz eléctrica que cada vez se hace más competitiva con nuevos actores, especialmente de China.
