La presidenta de Perú, Dina Boluarte, invitó a la marca china de automóviles BYD, líder mundial en la producción de vehículos eléctricos, a instalar una planta de ensamblaje en el país, aprovechando que en noviembre se inaugurará el moderno puerto de Chancay, el que permitirá el ingreso de grandes embarcaciones, facilitando el comercio internacional.
La mandataria hizo este ofrecimiento directamente al presidente de la marca, Wang Chuanfu, con quien se reunió ayer miércoles, en el marco de su visita oficial a China, en la que se ha visto con empresarios de otras grandes compañías como Huawei y en la que tiene previsto, el próximo viernes, encontrarse con el presidente del país, Xi Jinping.
"Vamos a construir un parque industrial, ya sea en Chancay o en Arequipa. En alguno de estos lugares se podría estar instalando esta industria de ensamblaje de vehículos. En vez de traer desde Perú a China el cobre y el litio, vayan a Perú a hacer su industria de ensamblaje", argumentó Boluarte.
La jefa de Estado del vecino país resaltó las grandes ventajas que ofrece Perú a las inversiones privadas, con medidas como la promoción de cero aranceles para incentivar que más empresas quieran invertir en el país. "Desde el Gobierno garantizamos un país democrático, con seguridad jurídica, y que lo que se pacta, se respeta en el tiempo", dijo la mandataria.
En mayo pasado BYD decidió frenar su proyecto para levantar una planta de cátodos de litio en Chile, valorada en unos 290 millones de dólares, acusando "lentitud" en las decisiones del Gobierno.
La vicepresidenta ejecutiva de BYD y CEO de la marca para las Américas, Stella Li, dijo en su momento que el proyecto en Chile “está, de cierta forma, en pausa" y explicó que hasta ese momento sólo habían recibido "algunas comunicaciones" de Corfo y del Gobierno respecto a la propuesta y lamentó que estas no hayan sido “claras para el futuro (…) No sabemos qué va a pasar".
La apuesta de Perú
Tras la oferta presentada a BYD por parte de la presidenta de Perú, su ministro de Transporte y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, fue más allá para tentar al fabricante chino, indicando que su país tiene gran interés por sustituir las unidades de transporte público por vehículos eléctricos. Para ello, se plantea establecer un acuerdo con el gobierno chino, para conseguir una línea de garantía de financiación.
Asimismo, dijo que su sector está trabajando un proyecto de ley, junto con el Ministerio de Economía y Finanzas y el Congreso de la República, para eliminar el pago de impuestos a la importación de vehículos eléctricos que sean destinados al transporte público.
Por su parte, el ministro de Economía y Finanzas, José Arista, recordó que Perú firmó un tratado de libre comercio con China en el año 2010. Eso no solo asegura arancel cero en Perú y China para una serie de productos, sino también brinda seguridad a las inversiones chinas en Perú, tal y como ha indicado.
Del mismo modo, precisó que de cara a finales de este año se estaría celebrando el tratado para evitar la doble tributación entre ambas naciones.