El líder mundial en la fabricación de vehículos eléctricos BYD firmó este lunes un acuerdo con el gobierno de Turquía para levantar en ese país una planta que se espera produzca unas 150.000 unidades al año.
Las instalaciones implican una inversión cercana a los 1.000 millones de dólares y se prevé que entre en operaciones a finales de 2026, creando unos 5.000 puestos de trabajo directo y otros miles indirectos.
Actualmente Turquía es visto como una puerta de entrada de BYD al mercado europeo ya que gracias a sus acuerdos comerciales los autos fabricados en su territorio pueden ser exportados a los mercados de la comunidad de países sin la imposición de los altos aranceles adoptados recientemente por sus autoridades en contra de los vehículos procedentes de China, algo similar a lo que ocurre con México y el mercado de América del Norte.
Además el complejo industrial anunciado en Turquía incluye un centro de investigación y desarrollo, según informó el Ministerio de Industria y Tecnología de ese país.
"Esta inversión para la producción de vehículos de nueva generación, con un alto valor nacional añadido, reforzará nuestra industria automovilística", declaró el ministro turco de Industria y Tecnología, Mehmet Fatih Kacir.
Según Kacir, la participación de BYD en Turquía forma parte de los esfuerzos del país por incorporar nuevas tecnologías y avanzar en I+D, con el objetivo de convertirse en un centro internacional de inversión, innovación y tecnología ecológica avanzada.
En la ceremonia de la firma del acuerdo asistieron el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan; el ministro turco de Industria y Tecnología, Mehmet Fatih Kacir, y el presidente y consejero delegado de BYD, Wang Chuanfu.
El pacto se firma en un contexto en el que Turquía ha establecido un impuesto adicional del 40% a los vehículos importados de China para impulsar la cuota de la producción nacional y fomentar las inversiones.
La Comisión Europea, similar a la acción turca, ha impuesto aranceles provisionales de hasta el 37,6% a las importaciones de vehículos eléctricos chinos, incluyendo BYD, cuya tarifa específica es del 17,4%.
La automotriz china BYD superó a la estadounidense Tesla como mayor vendedor mundial de vehículos eléctricos puros en el cuarto trimestre de 2023.