El fabricante de autos de lujo Ferrari anunció hoy que clausurará de manera definitiva una planta de generación de electricidad alimentada con gas metano, ubicada en su ciudad de origen, Maranello. La producción de esta planta será reemplazada por un incremento en la generación de energía renovable, principalmente solar, de aquí al final de la década.
La firma aseguró que la medida garantizará una reducción anual del 60% en las emisiones de gases contaminantes de alcance 1 y 2, además de lograr una disminución del 70% en el consumo de gas metano por parte de la compañía.
Hasta 2022, esta planta producía unos 120 gigavatios-hora de electricidad al año, gracias a dos motores endotérmicos de gas metano. Ahora, esa generación será reemplazada por energía limpia, que cubrirá aproximadamente el 40% del consumo energético de la planta de Maranello.
A futuro, el objetivo del nuevo sistema de energía es alcanzar una generación de alrededor de 10 megavatios punta (MWp) para 2030, lo que duplicará los 5 MWp que se producen actualmente.
Al respecto, el consejero delegado de Ferrari, Benedetto Vigna, indicó que con esta decisión “ya no utilizaremos gas para producir electricidad en esta planta, sino electricidad procedente de fuentes renovables”.
Añadió que esta medida representa “otro hito importante tras la instalación de nuestra planta de pilas de combustible, nuestros nuevos edificios energéticamente eficientes y las innovaciones en materia de eficiencia energética en nuestros procesos de producción".