SANTIAGO.- Fueron 58 días. Casi dos meses de concentración que tuvieron de todo. Acá la cronología de todo lo que vivió la "Roja" mientras estuvo enclaustrada por la Copa América.
El 7 de mayo comenzó oficialmente la preparación de Chile para la Copa América con los jugadores del medio nacional.
Ese día, a las 09:00 horas, debían presentarse en el complejo Juan Pinto Durán los arqueros Johnny Herrera y Paulo Garcés; los defensores José Rojas y Juan Cornejo; los volantes Jean Beausejour y Marco Medel y el atacante Esteban Paredes. Sin embargo, este último nunca llegó. A través de un comunicado,
la ANFP informó que el jugador de Colo Colo era liberado del proceso "debido a un desgarro del recto anterior, cuyo grado no le permitiría recuperarse dentro de los plazos establecidos para la preparación del plantel de cara al certamen continental".
Cuatro días más tarde,
Sampaoli entregó la lista de los 30 prenominados para la Copa América. Como era de esperar hubo algunas sorpresas, como los atacantes Ángelo Henríquez, Junior Fernandes, ambos del Dinamo de Zagreb, y los volantes Fernando Meneses, del Veracruz de México, y Edson Puch, de Huracán.
En tanto, el 13 de mayo el delantero del Celta de Vigo
Fabián Orellana explicó, a través de su cuenta de Instagram, que se había automarginado del proceso debido a que desde el cuerpo técnico le habían comunicado que no estaría en la lista final de 23 jugadores. Luego, se uniría su compañero de equipo el volante Pedro Pablo Díaz quien también se negó a participar del proceso.
Así y para evitar mayores problemas con algunos seleccionados, el 20 de mayo Sampaoli,
decidió marginar a Rodrigo Millar, José Pedro Fuenzalida, Mark González y Junior Fernandes. Finalmente Fuenzalida volvió a ser nominado, producto de la lesión de Carlos Carmona.
Ya en pleno entrenamiento con el contingente de jugadores del medio nacional y algunos del extranjero, el 25 de mayo, y para evitar el contacto con los hinchas y familiares, el DT casildense trasladó a los prenominados al Monasterio Celeste de Requínoa, lugar de entrenamiento de O'Higgins de Rancagua.
La estadía no estuvo exenta de polémicas, pues la rigurosa seguridad que existió en el entorno del recinto, con carabineros las 24 horas y corte de tránsito, provocó el malestar de la comunidad, quienes criticaron el hermetismo del entrenador del elenco criollo.
La "Roja" trabajó arduamente en el Monasterio hasta el sábado 30 de mayo, día en que el plantel volvió a Santiago. Esa misma tarde,
el estratego dio a conocer, finalmente, los últimos tres marginados. De los 26 nombres que seguían en camino, el técnico argentino optó por descartar a Marco Medel de Santiago Wanderers, Fernando Meneses de los Tiburones Rojos de Veracuz y a Juan Cornejo de Audax Italiano.
Por otro lado, el 1 de junio poco a poco se iba armando el plantel chileno de cara su debut ante Ecuador. Ese día comenzaron a llegar los "cracks", como el volante del Palmeiras
Jorge Valdivia, quien arribó al país tras una gran actuación en el triunfo 2-0 de su equipo frente al Corinthians por el Brasileirao.
Luego, el 8 de junio, fue el turno de Gary Medel y Alexis Sánchez. Este último llegó bajo una gran expectación periodística y con sus dos perros. Esa jornada también se integró el meta y capitán Claudio Bravo, mientras que el último en llegar a los trabajos de la selección fue el volante de la Juventus Arturo Vidal, quien piso suelo nacional en la madrugada del 9 de junio.
Dos días después, el elenco nacional tuvo su
estreno triunfal en el campeonato al vencer por 2-0 a Ecuador, con goles de Arturo Vidal y Eduardo Vargas. Si bien Chile ganó, dejó algunas dudas debido a su falta de finiquito y errores en defensas, incluso el propio Sampaoli reconoció que el equipo “no mostró en su totalidad lo que esperábamos”.
Y cuando todo concurría con bastante normalidad al interior del plantel nacional, en la previa del duelo ante Bolivia, el 16 de junio, ocurrió un hecho que golpeó al equipo y cuerpo técnico: Pasada las 21:30 horas, el volante
Arturo Vidal sufrió un violento accidente automovilístico en el acceso sur a Santiago, cuando volvía a la concentración en el complejo Juan Pinto Durán.
Luego de comprobarse que el jugador de la Juventus conducía su lujoso Ferrari bajo los efectos del alcohol, e iba en compañía de su esposa, quedó detenido toda la noche en San Bernardo y al mediodía del miércoles fue puesto en libertad.
Tras el accidente, las horas que se vivieron al interior del búnker de Macul fueron muy complejas, pues el presidente de la ANFP, Sergio Jadue junto a toda su directiva esperaba que el Sampaoli tomara la determinación de marginarlo de la selección, y así el formado en Colo Colo quedaba fuera de tener la opción de ganar por primera vez para Chile la Copa América.
Sin embargo, un grupo de referentes del equipo se reunió la misma noche del accidente con el DT para informarle que
todo el grupo apoyaba a Vidal y que lo mejor era que no fuera desafectado. Ante ello el 17 de junio el técnico se reunió con Jadue muy temprano en la mañana y luego pasado el mediodía para analizar el grave hecho que había protagonizado el volante.
Finalmente, pasada las 13:00 horas de ese miércoles el entrenador de la “Roja” confirmó que Vidal sólo
“cometió un error que no es tan agravante para excluirlo”. Una hora después, entre lágrimas Vidal ofreció perdón a su familia, jugadores y cuerpo técnico, y aseguró que se sentía “avergonzado”.
Luego de todo el incidente vivido, dos días más tarde Vidal era ovacionado por más de 45 mil espectadores en el Estadio Nacional al ser titular en el duelo frente a Bolivia, en el que
Chile goleó 5-0 y logró terminar líder del Grupo 1 del torneo continental y avanzar a los cuartos de final.
El rival para dicha fase fue Uruguay, el 24 de junio en el coliseo de Ñuñoa. Y como se esperaba, el partido ante los charrúas fue durísimo. Se jugó a gran intensidad y a ratos con mucha vehemencia, sobre todo por parte de los jugadores de la “Celeste”.
Y fue en ese mismo encuentro,
con victoria para los nacionales por la cuenta mínima, donde se vivió el hecho más polémico de la Copa América. Minuto 62 y desde la tribuna de marquesina se observó un encontrón entre el defensa chileno Gonzalo Jara y el atacante uruguayo Edinson Cavani. Desde dicho sector del estadio sólo se apreció un leve manotazo del delantero el que fue advertido por el árbitro brasileño Sandro Ricci quien no dudó en expulsar al charrúa.
Pero a los pocos minutos de que concluyera el partido, comenzó a circular por las redes sociales la verdadera razón del enojo de Cavani.
El zaguero nacional no encontró mejor cosa que introducirle un dedo en el trasero al jugador del PSG. Finalmente, "Jarita" fue castigado por oficio con tres partidos pero le redujeron la sanción a dos.
Por el paso a la final del certamen Chile se enfrentó con Perú el 29 de junio. En un duelo trabado, y con pocas acciones en los arcos, el atacante de la “Roja”
Eduardo Vargas se convirtió en la gran figura del lance al anotar los goles en el 2-1 para el equipo de Sampaoli.
Tras la victoria, el combinado nacional logró llegar a la definición del título después de 28 años. La “Marea Roja” festejó en todo el país, mientras que el plantel a su llegada al complejo Juan Pinto Durán fue recibido por cerca de 600 personas. En el lugar, todos los jugadores salieron por unos minutos a compartir con los hinchas y a celebrar junto a ellos la clasificación. La alegría era total.
Y llegamos al 4 de julio. Luego de 58 días esta cronología de un largo sueño que se hizo realidad llegó a su fin más esperado. Por primera vez en su historia la “Roja” obtuvo el título de la Copa América al derrotar a la poderosa Argentina de Messi y compañía.
El duelo fue peleado, duro. Chile no pudo vencer a Argentina en el tiempo reglamentario y en el alargue se mantuvo el cero en el marcador. Chile se enfrentaba nuevamente a los penales, desde aquella fatídica tarde en Brasil.