PARÍS.- El francés Jules Bianchi, que
murió tras no salir del coma en el que entró tras un accidente en el GP de Japón en octubre de 2014, era "un piloto brillante" y "un ser humano magnífico", señaló este sábado su escudería Manor Marussia en un comunicado.
"Jules tenía un talento brillante. Estaba destinado a lograr grandes cosas en nuestro deporte y a lograr éxitos que merecía ampliamente. Además era un ser humano magnífico, que dejó una gran impresión sobre una gran cantidad de personas en el mundo", señaló el equipo.
"Era a la vez un piloto ferozmente motivado y una persona muy calurosa, humilde y afectuosa, que iluminó nuestros garajes y nuestras vidas", continuó.
"Estamos orgullosos de haber ofrecido a Jules la posibilidad de mostrar al mundo lo que era capaz de hacer en un Fórmula 1. Fue un honor haberlo tenido como piloto, compañero y evidentemente amigo", añadió.
"Las palabras no son suficientes para describir la inmensa tristeza del equipo", finalizó la escudería, cuyos "pensamientos y oraciones están con la familia Bianchi".
Afectada por el accidente de Bianchi, la escudería Marussia F1, con la que el francés compitió en 2013 y 2014, fue liquidada en otoño debido a sus problemas económicos. A continuación fue salvada in extremis por inversores británicos y retomó la Fórmula 1 con el nombre de Manor Marussia.